Checkpoint Systems, principal proveedor de sistemas anti hurto, ha detectado un importante crecimiento de las ventas de su etiqueta 2010 RF, llamada Food Label, para alimentos frescos. El crecimiento de las ventas, según la compañía, es consecuencia directa del reciente aumento de los hurtos de este tipo de productos.

La actual recesión económica está fomentando otros tipos de modalidades de robo y de toma de medidas por parte del sector retail. Está aumentando el hurto de bienes de primera necesidad y el perfil mayoritario del ladrón es no profesional. El sector retail apuesta por los sistemas de seguridad a tenor del aumento de los hurtos en los establecimientos y para paliar el entorno económico desfavorable y el actual descenso del consumo.
El perfil del ladrón es ahora el de un adulto, miembro de una familia con problemas económicos cuyo principal objetivo es robar alimentos frescos y bienes de primera necesidad. De ahí que algunos establecimientos hayan optado por proteger estos artículos con etiquetas Food Label o encerrar productos alimenticios en cajas de seguridad antes destinadas a otro tipo de productos.
Ya son 10 millones los productos alimentarios frescos (cárnicos, ibéricos) protegidos con la etiqueta 2010 RF.
Esta etiqueta posee la Certificación ISEGA para el contacto directo con alimentos  frescos. Asimismo, está certificada por TÜV para su uso en microondas,  bajo determinadas condiciones. Es resistente a la humedad y está diseñada para ser aplicable en productos alimentarios que se conservan en frío a una temperatura máxima de -18ºC.
La Confederación Española de Comercio  ha advertido de que si se mantiene la “espiral” de frenazo del consumo los próximos seis meses, en 2009 podría desaparecer hasta un 10% del sector, lo que supondría el cierre de unos 60.000 establecimientos y la pérdida de entre 25.000 y 30.000 puestos de trabajo. Los últimos meses de 2008 han dejado secuelas en el sector comercial, con importantes descensos de ventas.
El último Barómetro Mundial del Hurto, elaborado por el Center for Retail Research de Nottingham, revela que en 2008, la pérdida desconocida ha ascendido a 2.510 M€ en España. Esta cifra representa el 1,31 % de las ventas de este sector y supone un incremento de 2,3% respecto 2007 (1,28% de las ventas). Cada familia española paga al año 195€ más por estas pérdidas, lo que equivale a 70€ por persona. La pérdida desconocida en España ha pasado de un 1,28% en 2007 a un 1,31% en 2008.
El Barómetro de 2009, que se presentará a finales de este año, mostrará sin duda unos de los panoramas más negativos, con un acusado incremento del hurto.

La respuesta del retail
Sin sistemas de protección contra la pérdida desconocida, los establecimientos  sufren cada vez más el hurto.
Existen múltiples sistemas de seguridad que evitan los robos: soluciones anti hurto de cuarta generación, gamas de etiquetas de radiofrecuencia de alto rendimiento, con tamaño reducido pero con mayor detección y un amplio surtido en protectores de policarbonato (cajas de seguridad), para exponer los artículos sin arriesgar su seguridad. El objetivo no es sólo perder menos, sino también ganar más, proteger los márgenes de la distribución.
La aplicación de las etiquetas de seguridad puede ser realizada de forma manual en el punto de venta o, de modo automático, durante en proceso de envasado de los alimentos. Están técnicamente preparadas para múltiples aplicaciones a nivel del envase y pueden ser introducidas en productos secos o frescos, a temperatura ambiente o congelados.

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