El mercado mundial de dispositivos para el hogar inteligente representó $68.8 mil millones de dólares en 2020 y se espera que alcance los $156.6 mil millones de dólares en 2028. Es mucho dinero que se invierte con rapidez en algunas mejoras importantes en el hogar. Nuestros hogares están pasando del nivel primario al universitario rápidamente; algunos incluso van derecho a su doctorado.

La tecnología del hogar inteligente ha evolucionado a lo largo de los años para llegar a este punto de inflexión. En los comienzos, el wifi permitía aplicaciones más simples, como los termostatos inteligentes. Actualmente, casi todo puede automatizarse en el hogar; desde los timbres con video hasta los sistemas de rociadores automatizados, pasando por la iluminación inteligente, los asistentes de voz y los grifos de agua activados por voz.

Los consumidores de hoy buscan conectividad, eficiencia y sostenibilidad en todos los aspectos de su vida cotidiana. Veamos algunas de las últimas tecnologías, opciones de conectividad y protocolos que cumplen esas promesas en el mercado de los dispositivos para el hogar inteligente.

La conectividad es importante

Cuando los dispositivos para el hogar inteligente empezaban a aparecer, el wifi era una gran opción de conectividad porque la mayoría de la gente tenía una red wifi en su hogar. Sin embargo, a medida que evolucionó, la industria se alejó rápidamente del wifi como principal opción de conectividad, ya que consume mucha energía. Además, si bien eso es bueno para los productos y dispositivos que están siempre conectados directamente a una fuente de alimentación en la pared, para los sensores y productos que funcionan con baterías, el wifi no es una opción sostenible.

Otro problema con el wifi es la puesta en marcha y la concesión de acceso a la red wifi a todos y cada uno de los dispositivos inteligentes: si está equipando toda su casa con iluminación inteligente, son muchas las bombillas a las que hay que otorgar acceso a la red. ¿Y qué hará cuando tenga que cambiar la contraseña de la red wifi de su casa? ¿Volver a conectar todas las bombillas, los sensores y los demás dispositivos? No, gracias.

El Bluetooth se ha convertido en la opción de conectividad ideal tanto desde el punto de vista del ahorro de energía como de la puesta en marcha. Además, es una opción de fácil acceso, ya que la mayoría de la gente tiene dispositivos que disponen siempre de Bluetooth, como los teléfonos inteligentes. El Bluetooth también es una buena solución para el problema de la puesta en marcha. Puede conectar las bombillas o el dispositivo inteligente que elija con su teléfono, conectarlo automáticamente a su wifi y que reconozca su red doméstica para siempre a través de Bluetooth.

La simplificación de los protocolos del hogar inteligente

La simplicidad es un tema fundamental en materia de dispositivos para el hogar inteligente: tienen que ser fáciles de configurar y usar porque, en última instancia, la gente utiliza estos dispositivos por comodidad, no para vivir una aventura de programación informática. Si la configuración no es lo suficientemente simple, los dispositivos no serán utilizados. Por eso, una de las preguntas impulsoras desde el principio ha sido ¿cómo pueden los fabricantes hacer que la configuración y el uso de estos dispositivos sean super simples y se adapten a nuestro estilo de vida? 

A medida que los fabricantes de dispositivos inteligentes empezaron a crear sus líneas de productos para incluir más productos que funcionaran juntos, empezaron a incorporar protocolos de hogar inteligente como Zigbee y Z-Wave para que sus productos fueran de propiedad exclusiva. Los protocolos del hogar inteligente son esencialmente el lenguaje que utilizan los dispositivos para comunicarse entre sí.

El hecho de que todos los dispositivos hablen el mismo "idioma" permite que todos los dispositivos se comuniquen y ofrezcan una mayor comodidad. Además, si todos los dispositivos del hogar pueden hablar el mismo idioma y conectarse a un único "concentrador", que se conecta a la red wifi del hogar, el usuario puede controlar todos los dispositivos desde un único concentrador en vez de con cada dispositivo por separado. 

Pero los problemas surgen para el consumidor cuando tiene una puerta de garaje inteligente que habla un protocolo y bombillas inteligentes en un sistema diferente. De repente, el propietario de este hogar tiene un conjunto de aplicaciones como Zigbee, Wemo, Smart Things, Ecobee, GE, Alexa y muchas más entre las que debe alternar para controlar todos sus dispositivos "inteligentes", y vuelve a tener que ser un programador o desarrollador para obtener alguna comodidad del sistema. Así que, aunque los protocolos de propiedad exclusiva fueron una buena idea al inicio, en última instancia, complican las cosas para los consumidores habituales.

La interoperabilidad es la clave

Conseguir que todo funcione de forma conjunta es el mayor reto para popularizar los dispositivos para el hogar inteligente, y cada vez es más simple. La interoperabilidad y la capacidad de tomar múltiples dispositivos de diferentes fabricantes y hacer que funcionen juntos en el mismo sistema es el factor clave para simplificar la experiencia del consumidor. 

En un hogar inteligente totalmente automatizado, se contará tanto productos enchufados, como una bombilla, como productos que funcionen con baterías, como un sensor de temperatura. Luego, a medida que la red del hogar se expanda del interior al exterior, se contará con cámaras de seguridad, sistemas de riego, etc., en los que el alcance está expandido, y el Bluetooth y el wifi empezarán a quedarse cortos. 

Un nuevo protocolo en el mercado, que es más bien un protocolo "abierto" que tiene que ver con la interoperabilidad, es Matter. Lo mejor de Matter es que cada dispositivo conectado al protocolo Matter actuará como un concentrador y expandirá la red. Así, un sistema de riego situado fuera de la ventana de la cocina se comunicará con la bombilla enchufada dentro de la cocina, que a su vez se conectará a todo el sistema, ya que no se necesita un concentrador. 

Además, como Matter es un sistema sin concentradores, la propia red será inteligente, no una aplicación que se ejecute en un teléfono, una tableta o una computadora. Un ejemplo de esta inteligencia de la red sería que si usted enciende el televisor y activa Netflix (o tal vez le diga a su mando a distancia con Alexa que haga estas cosas), automáticamente las persianas se cerrarán, las luces se atenuarán a cualquiera que sea su "modo de película" y las puertas se bloquearán. Y todas estas piezas están hechas por diferentes fabricantes, sin embargo, todas funcionan en concierto, y eso es lo más importante.

Además, por encima de la interoperabilidad, hay una capa de inteligencia artificial que hará que sea aún más útil para que el consumidor no tenga que gestionar activamente estos dispositivos. Por ejemplo, si hay un sensor de movimiento y detecta que el propietario de la casa está en el piso de abajo, se asegurará de que la temperatura del piso de abajo esté en la configuración de comodidad preferida. Asimismo, la red y los sensores aprenderán con el tiempo cuáles son los hábitos y comportamientos habituales del propietario y ajustarán el entorno a su gusto.

Reflexiones finales

En su forma más simple, el hardware y los dispositivos para el hogar inteligente se han mantenido iguales en muchos aspectos, pero los nuevos avances en el software han aportado nueva inteligencia, nuevas características y capacidades. Habrá un obstáculo psicológico al que los consumidores tendrán que acostumbrarse en cuanto a que sus hogares hagan estas cosas de forma automática, pero es probable que la comodidad y la utilidad superen las inquietudes. A fin de mantenerse relevantes para los consumidores, las empresas están avanzando en las características de seguridad para garantizar a los usuarios de estos dispositivos que su información privada dentro de sus hogares está a salvo.

El precio también será una barrera de entrada para la adopción masiva. Cada día estos dispositivos son más asequibles, pero siguen siendo una inversión, y los consumidores tienen que decidir lo que es importante para ellos. La interoperabilidad contribuirá a reducir el precio y hará que los distintos dispositivos sean más fáciles de adoptar, ya que la gente no estará obligada a utilizar los productos de un determinado fabricante para siempre.

Por suerte, estas tecnologías continuarán construyéndose las unas a partir de las otras durante mucho tiempo. Los consumidores no tendrán que adquirirlo todo de una vez, sino que podrán construir sus colecciones con el tiempo. Digi-Key sigue impulsando la innovación de los dispositivos IoT (internet de las cosas) y los diseños del futuro para una amplia variedad de industrias y aplicaciones, así como los recursos educativos sobre las tecnologías emergentes. 

Robbie Paul es director de Desarrollo Comercial de IoT y Josh Mickolio es gerente de Desarrollo Comercial de Proveedores: en modo inalámbrico para Digi-Key Electronics. Digi-Key es el líder y el innovador continuo en la distribución de alto servicio de componentes electrónicos y productos de automatización en todo el mundo, que provee más de 13,4 millones de componentes de más de 2.300 fabricantes de marcas de calidad. Vea la segunda temporada de la serie de videos "City Digital" de Digi-Key aquí.

Robbie Paul y Josh Mickolio, Digi-Key Electronics